Cocinar el salmón en una sartén con el aceite, vuelta y vuelta, hasta que esté hecho por ambos lados.
Pelar el pepino y cortarlo en trozos pequeños. Quitar las semillas al tomate y cortarlo en rodajas.
Exprimir el limón y mezclarlo con la pasta de sésamo para hacerla menos densa.
Servir el salmón, verter la salsa de tahín por encima y acompañar con una ensalada de tomate, pepino y aceitunas o alcaparras aliñado al gusto.
0 raciones